Sólo recuerdo el estruendo de la bocina de ese bus. Me detuve y mire sin reacción al conductor. El semáforo estaba en rojo, ¿Por qué pitó? ¿Por qué quería intentar pasar antes que yo? El semáforo estaba de mi lado pero aún así mis pies se detuvieron en medio de la calle al igual que mis pensamientos ¿Por qué direccionó el sonido de su bocina a mis tímpanos? ¿Por qué provoco un pequeño sacudón en mi cabeza? ¿Por qué si el semáforo estaba en rojo?
Me detuve y mire las rayas blancas debajo de mis pies, el semáforo en rojo en la esquina de la Reina Victoria y la 12 de Octubre, un Vingala reclama paso y mi cabeza en silencio. Gracias a la bocina de un conductor desesperado deje de pensar.
Gracias a la bocina de un conductor
Publicado por Gabiru en 15:03
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario